Las normas definitivas para la instalación de freeshops en el lado brasilero del Chuy y otras ciudades fronterizas quedarán listas a finales de junio, el gobierno de Brasil abrirá en estos días una periodo de consulta pública para que los municipios y entidades presenten sus sugerencias.
La fecha ha sido confirmada por el subsecretário de aduanas del vecino país, según se informa desde el Diario Binacional Tiempo de Noticias.
Una vez instalados los freeshops en el lado de Brasil podrán vender productos nacionales e importados. Los propios ciudadanos brasileros podrán realizar compras de hasta 300 dólares mensuales en estos locales que sumados a los 150 dólares libres de impuestos que tienen para los freeshops de Uruguay, podrán gastar en la frontera hasta 450 sin impuestos.
Para el Chuy esto generará mayor movimiento turístico y por la mayor competencia podría notarse una baja en los precios. Pero al mismo tiempo los freeshops del lado uruguayo podrían verse afectados por estas diferencias en los límites de compras que el estado norteño implementa.